Los cables libres de halógenos se han convertido en una opción cada vez más solicitada en proyectos eléctricos que priorizan la seguridad humana y la integridad de la infraestructura. Su aplicación está creciendo notablemente en espacios cerrados o con alta ocupación.
A diferencia de los cables tradicionales, estos conductores reducen drásticamente la emisión de gases tóxicos y corrosivos durante un incendio, minimizando riesgos para personas, equipos y estructuras.
En Colombia, su uso comienza a consolidarse en hospitales, túneles, centros comerciales y otras edificaciones sensibles, impulsado por exigencias normativas como el RETIE y criterios de sostenibilidad en la construcción moderna.
Desde Francisco Murillo S.A.S., te invitamos a seguir leyendo y conocer por qué esta tecnología está marcando la diferencia en seguridad y cumplimiento técnico.
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¿Qué son los cables libres de halógenos?
Los cables libres de halógenos, también conocidos como LSZH (Low Smoke Zero Halogen), son conductores eléctricos cuyo aislamiento y cubierta externa están fabricados con materiales libres de compuestos halogenados como el cloro, flúor o bromo. Estos elementos, presentes en cables tradicionales (como los de PVC), al quemarse generan humos densos y gases tóxicos que agravan los efectos de un incendio.
A diferencia de los cables convencionales, los cables LSZH están diseñados para emitir muy poca cantidad de humo y prácticamente cero gases corrosivos o tóxicos en caso de combustión. Esto los convierte en una opción más segura en espacios cerrados o con alta circulación de personas, donde la visibilidad y la calidad del aire son factores críticos durante una evacuación.
Su composición incluye polímeros especialmente formulados (como poliolefina modificada o compuestos sin halógenos) que ofrecen buen comportamiento frente al fuego, sin comprometer la flexibilidad ni la resistencia mecánica del cable. Además, suelen cumplir con normas como IEC 60332, IEC 61034 y IEC 60754, que regulan la propagación de llama, densidad de humo y acidez de gases, respectivamente.
El término LSZH resume precisamente estas propiedades: Low Smoke (baja emisión de humo) y Zero Halogen (ausencia de halógenos). Es una clasificación técnica que hoy en día ya es estándar en múltiples especificaciones de proyectos eléctricos modernos y normativas como el RETIE en Colombia.
Beneficios clave en caso de incendio
Uno de los principales argumentos a favor de los cables libres de halógenos es su comportamiento superior en situaciones de incendio. Este tipo de conductores no solo mejora la seguridad de las personas, sino que también protege los equipos críticos y reduce los daños estructurales.
1. Baja emisión de humo opaco
Durante un incendio, la visibilidad es un factor determinante para una evacuación segura. Los cables tradicionales con PVC generan una densa nube de humo que dificulta el desplazamiento y desorienta a los ocupantes. En cambio, los cables LSZH emiten hasta un 80% menos de humo, facilitando el acceso de los equipos de emergencia y reduciendo el tiempo de respuesta.
2. Menor toxicidad en ambientes cerrados
Los halógenos liberan gases altamente corrosivos y tóxicos al quemarse, como el cloruro de hidrógeno, que puede causar asfixia, irritación y daño pulmonar. Los cables libres de halógenos no liberan este tipo de gases, lo que disminuye el riesgo para la salud humana, especialmente en hospitales, túneles o centros educativos.
3. Reducción de daños a equipos electrónicos
Los humos corrosivos no solo afectan a las personas, también deterioran aceleradamente tableros, sensores, luminarias y otros componentes del sistema eléctrico. Los cables LSZH generan menor acidez y conductividad superficial, lo que minimiza el daño a sistemas críticos y facilita la recuperación operativa tras un siniestro.
4. Cumplimiento normativo y confiabilidad
Este tipo de cableado suele estar respaldado por normativas internacionales como IEC 60754-2 (acidez de gases), IEC 61034 (densidad de humo) y IEC 60332 (no propagación de llama). Su uso puede ser determinante para cumplir con exigencias del RETIE o para sumar puntos en certificaciones de construcción sostenible.
Aplicaciones recomendadas en Colombia
Los cables libres de halógenos se están convirtiendo en la opción preferida para proyectos donde la seguridad, la normativa y la protección de vidas humanas son prioridades. Estas son las aplicaciones más comunes y recomendadas en el país:
Hospitales y clínicas
- Espacios con pacientes vulnerables, equipos médicos sensibles y presencia de gases combustibles.
- El uso de cables LSZH reduce la toxicidad en caso de incendio y protege las áreas críticas.
- Suelen ser requeridos en instalaciones nuevas bajo normas de bioseguridad y diseño hospitalario.
Túneles, estaciones y espacios confinados
- Zonas donde la visibilidad y el acceso en emergencias son limitados.
- La baja emisión de humo facilita evacuaciones y labores de rescate.
- Se usan en túneles vehiculares, instalaciones subterráneas, estaciones de transporte y cuartos técnicos cerrados.
Centros comerciales y edificaciones públicas
- Alta concentración de personas en recintos cerrados.
- Disminuyen el riesgo de intoxicación y daños en infraestructura eléctrica.
- Recomendados en redes de emergencia, rutas de evacuación, centros de control y tableros eléctricos.
Transporte masivo, aeropuertos y oficinas corporativas
- Ambientes que concentran equipos electrónicos, redes de datos y sistemas críticos.
- Los cables LSZH ayudan a mantener operativa la infraestructura tras un incidente.
- Usados en sistemas de comunicación, automatización, salas de servidores y centros de datos.
¿Qué exige el RETIE frente a este tipo de cables?
En Colombia, el Reglamento Técnico de Instalaciones Eléctricas (RETIE) establece criterios orientados a la seguridad humana y la protección de la infraestructura en instalaciones eléctricas. Aunque el RETIE no menciona expresamente los “cables libres de halógenos” como categoría comercial, sí exige características que estos cables cumplen de forma natural.
Estas son las consideraciones clave del RETIE que refuerzan el uso de cables LSZH en determinados entornos:
- Reducción de riesgos para la vida humana en caso de incendio:
El RETIE establece que los conductores deben minimizar la generación de gases tóxicos, opacidad de humo y propagación de llama, especialmente en instalaciones donde haya alta afluencia de personas o dificultad para evacuar. - Uso obligatorio de materiales con baja emisión de humo y gases corrosivos
En áreas como hospitales, túneles, cines, centros comerciales, estaciones subterráneas y edificaciones institucionales, se exige que los materiales eléctricos ayuden a mantener la visibilidad y no liberen sustancias nocivas durante una emergencia. - Compatibilidad con normas internacionales de seguridad contra incendio
Cables LSZH suelen cumplir con normas como IEC 60332 (resistencia al fuego), IEC 61034 (densidad de humo) y IEC 60754 (acidez de gases), lo cual facilita la demostración de conformidad con el RETIE. - Aplicación en diseños sostenibles y licitaciones técnicas
Cada vez más proyectos públicos y privados solicitan que los componentes eléctricos se alineen con políticas de sostenibilidad o certificaciones tipo LEED. El uso de cables sin halógenos puede apoyar el cumplimiento de estos requisitos.
Por lo tanto, si bien el RETIE no obliga el uso de cables LSZH de forma general, sí condiciona su adopción en proyectos donde la seguridad en caso de incendio es prioritaria, haciendo que esta tecnología sea altamente recomendable y, en muchos casos, esperada por las interventorías y entidades contratantes.
¿Por qué este cambio es también una oportunidad?
La adopción de cables libres de halógenos no debe verse solo como una exigencia normativa o una respuesta a riesgos. También representa una oportunidad real para diferenciarse técnica y estratégicamente en el desarrollo de proyectos eléctricos.
- Mayor valor técnico en la especificación:
Incluir cables LSZH en la fase de diseño aporta argumentos sólidos de seguridad, cumplimiento normativo y compatibilidad con certificaciones internacionales. Esto da valor agregado a propuestas técnicas, especialmente en licitaciones públicas y proyectos de alta exigencia. - Reducción de costos de recuperación y mantenimiento postincendio:
Al evitar la corrosión de componentes, los cables sin halógenos ayudan a minimizar daños a equipos, redes de comunicación y tableros. Esto reduce significativamente los costos operativos en caso de siniestros. - Ventaja competitiva en proyectos sostenibles:
Cada vez más constructoras, entidades públicas y empresas privadas priorizan soluciones que reduzcan su huella ambiental. Los cables LSZH son compatibles con políticas ESG, certificaciones como LEED o EDGE y marcos de compras verdes. - Posicionamiento técnico a futuro:
Invertir desde ahora en tecnología segura y sostenible anticipa exigencias que serán cada vez más comunes en los códigos eléctricos, reglamentos técnicos y criterios de evaluación de proyectos.
Este tipo de soluciones no solo elevan los estándares del proyecto, sino que también proyectan una imagen de compromiso con la seguridad, la innovación y la responsabilidad ambiental.
Elegir cables seguros también es construir con visión
Los proyectos eléctricos actuales no solo deben cumplir con normas técnicas: también deben anticiparse a escenarios de riesgo, proteger a las personas y alinearse con estándares de sostenibilidad. Por eso, adoptar cables libres de halógenos no es una moda, sino una decisión inteligente para quienes lideran obras seguras, responsables y de alta calidad técnica.
En Francisco Murillo S.A.S., entendemos que la innovación empieza desde la especificación. Por eso, acompañamos a nuestros clientes con soluciones confiables, respaldo normativo y asesoría profesional para que cada instalación eléctrica esté a la altura de los nuevos desafíos del sector.
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